jueves, 24 de noviembre de 2011

Nube de mariposas...

Esas pequeñas traicioneras, que te hacen cosquillas desde dentro, que te avisan de un nuevo comienzo. Son ágiles y de un miln de colores, que revolotean de allí par allá. Pequeñas pero numerosas que hacen que el bello de tus brazos se ponga de punta y un escalofrío te recorra la espalda, que un nudo se te atragante en la garganta al respirar y solo desees sonreír de manera atolondrada e infantil.
Son esas amigas que te dicen que él está cerca. Se te acelera el corazón y luego cuando sonríe todo se para, el silencio es infinito y no existes nada más.
Mi estómago a soportado de todo, pero esa nube de mariposas, que sólo aparece cuando algo es real, me da alas. Alas para recorrer nuevos mundos. Esperanza para SENTIR cosas nuevas. Confianza para ser YO misma. Y sobretodo, me hace pensar que esas amigas traicionera de miles de colores estarán ahí para siempre.

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